Green smoothie con espinacas, plátano, naranja y almendras

Green smoothie con espinacas, plátano, naranja y almendras - Reto Recetas Sanas

Y bien, sí: ¡yo también me he tenido que convertir a los green smoothies! Aunque tenga un aspecto poco invitador y más allá de esos colores que te puedan inquietar un poquito, os aseguro que estos batidos de frutas y verduras son una delicia además de una súper carga de vitaminas, minerales y aminoácidos.

La primera vez que escuché la existencia de un batido donde se mezclaban espinacas y plátano, no pude hacer otra cosa que sentirme perpleja pero no quise quedarme en las apariencias y, después de buscar información sobre los beneficios de tan bizarra mezcla, me decidí a probarlo y… ¡os aseguro que no me arrepentí!

Como intento hacer siempre o casi con la fruta y la verdura, aprovecho las que están de temporada, así que en este post combinaremos las espinacas y la naranja (de temporada) al plátano y las almendras.

Ingredientes para 2/3 vasos:

50 g de espinacas frescas crudas

1 plátano (mejor si muy maduro)

300 ml de agua (mejor si fresca/fría)

1 naranja (el zumo)

30 g de almendras peladas

Preparación:

1. Coger la naranja y hacer el zumo.

2. Limpiar las espinacas, echarlas en el vaso de la batidora junto al agua y el zumo de naranja e iniciar a triturar.

3. Incorporar el plátano y las almendras hasta que esté todo lo suficientemente triturado y mezclado.

4. Si se desea, se puede usar un colador para quitar los grumitos (yo no lo hago, pero a alguien podrían molestarle los trocitos minúsculos).

Consejos:

- Le podéis echar uns cubitos de hielo si os gustan los batidos fresquitos (en ese caso, usar algo menos de agua para que no se quede demasiado líquido).

- Es muy importante que a las espinacas le añadamos la vitamina C, porque ayuda a la absorción del hierro que contiene la verdura, así que si no os gusta la naranja, podéis usar un limón o un pomelo, aunque el sabor se puede alterar y hacerse más ácido.

- Este Smoothie se presta a un desayuno perfecto, ya que hacemos el pleno de vitaminas, minerales y proteínas. Bastaría un trocito de pan con un poquito de mermelada o un trozo de un bizcocho casero y nos vamos bien completos al trabajo!